miércoles, 1 de diciembre de 2010

Ella es la Juani


Yo soy la Juani

Supongo que se tratará de retratar a una especie de tribu urbana, esa que se dedica a tunear los coches, y en ello ocupan casi todo su tiempo y dinero, porque cuando no, practican el juego virtual, las discotecas y el macarrerío. Generalmente se trata de gente de humilde estrato social y con limitadas opciones de cambiar de vida. Ellos machistas por definición se entretienen con el peligroso deporte de andar por el filo de la navaja, sin pensar en las consecuencias, son tan jóvenes que no se paran a pensar en ellas, Ellas en ver quien aguanta más a su maromo, operarse las tetas, o romper la pista bailando el aserejé. Abandonan sus estudios temprano, lo que les obliga a trabajos poco remunerados, por lo menos en su juventud de aprendizaje. El sexo es muy importante y en su libertad de acción lo ejercitan alegre y sobradamente, aunque pueda haber quien pierda los papeles.

En todo este “fregao” aparece La Juani.

Películas hay que se han centrado en ciertas problemáticas juveniles de acuerdo a sus circunstancias, que luego se convirtieron en iconos de estilos de vida de esa juventud. Me viene a la memoria alguna como, Fiebre del sábado noche, que representó a la juventud de los 80, el Baile y las Discotecas; Grease, de los 50, o American Graffiti con la relaciones del amor y la vida para iniciados; Hair, a los hippies y sus conflictos sociales; otras habrá de estudiantes, universitarios, tribus urbanas, etc., que nos vienen a mostrar unos particulares estilos de vida juveniles; entonces… ¿porqué no ésta otra?, la duda es, ¿pretenderá está película convertirse en icono por alabanza de un estilo de vida?

No sé si será una moda hispana o internacional, mucho me temo que internacional, y a este pobre y cortito modo de vivir se dedican gran parte de la juventud actual mundana. Porque así, de entrada, poco hay que destacar de todo esto, excepto cuando a los personajes se les pone nombre, esto es, en lo personal.

Se trata de un personaje como otro en su circunstancia. Si hubo un tiempo en que las historias cinematográficas se construían de gente extraída del lujo, en los que el espectador contemplaría con todo detalle sus miserias, porqué no hacerlo de un personaje incluido en el mundo de la vulgaridad. ¿Acaso no tiene cosas importantes que transmitir?

Como en todos los sitios, se aman, sufren, se divierten, y tienen inquietudes, aunque alguna de ellas sea cambiar las llantas del coche a trescientos euros cada una. Pero lo peor de todo es que también pueden caer arrastrados, más aun, al submundo de la ramplonería y la indignidad, por si no tenían bastante.

Será tal vez entonces cuando solo nos puede salvar el orgullo, y una resolución que seguramente nos desaparecerá con el tiempo, pues de donde no hay, no se puede sacar.

Rafa, de uno de los dos

2 comentarios:

Juan Antonio H. dijo...

La entrada para un nuevo blog, no se si es la mas idónea aunque la problemática juvenil siempre será noticia.
No he visto la película pero el tema es de lo mas conocido para cualquier viejuno que se precie, la juventud y su maquina donde toda su vida pasa alrededor de ella, (digamos que me siento bastante identificado) la rebeldía juvenil es parte de una cierta rutina de la vida al igual que cuando naces te alimentas de leche.
En resumen es una especie de guión por el devenir de la vida de cada uno.
La anoto para visionarla.
Suerte con tu nuevo proyecto (te seguiré)
Juan Antonio

Rafael C. dijo...

No. Aquí no hay que desearme suerte, si no fuera para poder seguir haciendo o escribiendo lo que me plazca.
Simplemente es en otro blog donde pueda meter algunas de mis cosas que probablemente no encajen o sean oportunos en nuestra querida Paelleragazpachera. Only.
Saludos