Dije ayer:
En la ecuación de las fidelidades ideológicas no cabe la razón como un factor que de soluciones a los conflictos internos, ni que por consiguiente, corrija nada puesto que no habrá nada que corregir que se encuentre bajo la solidez de esa fidelidad.
Lo que ahora que lo pienso es una variante de aquello de: "nadie convence a nadie"